El verdadero éxito de un líder se mide en su capacidad de multiplicarse. Un líder puede ser una persona increíblemente capaz, pero si no deja una semilla en otros, si no inspira a otros para que ellos también crezcan, su impacto queda limitado. En este episodio, vamos a ver cómo hacer discípulos puede mejorar no solo nuestra habilidad como líderes, sino también crear un legado que perdure en el tiempo y transforme las vidas de aquellos a nuestro alrededor.

Cuando hablamos de liderazgo servicial, nos referimos a un estilo de liderazgo donde el líder ve su rol principal no como el de una autoridad, sino como alguien que facilita el crecimiento, el bienestar y el éxito de su equipo. Esto implica una inversión genuina en el bienestar de cada miembro, en sus sueños y aspiraciones, y en sus desafíos diarios.

Ser un líder auténtico en un entorno competitivo significa, en primer lugar, liderar desde tus valores fundamentales, no desde lo que el entorno espera que seas. A menudo, los líderes sienten la presión de adaptarse a estilos de liderazgo que ven en otros o que son populares en la industria. Sin embargo, la autenticidad consiste en hacer una pausa y reflexionar sobre quién eres realmente, cuáles son tus convicciones y cómo esas convicciones pueden influir positivamente en tu liderazgo.